CORRER A TODA VELOCIDAD NO SIEMPRE ASEGURA EL PRIMER LUGAR.
Es increíble lo rápido que avanza el reloj de la vida. El mundo va tan rápido y acelerado que simplemente pareciera que el tiempo no alcanza. Esto es muy curioso porque no solo ha afectado nuestra forma de ver, sentir, o pensar, sino incluso nuestra forma de sanar!
Nos afanamos tanto en querer avanzar rápidamente, tal como el mundo nos tiene acostumbrados, que simplemente ponemos curitas emocionales en nuestra alma y continuamos a toda prisa con nuestro camino. ¿Alguna vez te has hecho una herida profunda? Si solo cubres esa herida notarás que el dolor va incrementando cada vez más, hasta volverse una infección y el problema que parecía una simple herida, puede convertirse en algo mucho más grande, ¡Por no tomarse el tiempo de limpiarla y dejarla sanar!
Así de importante, es detenernos en medio de todo el caos que ocurre en el mundo o en nuestras vidas y dar pasos seguros. ¡Porque no se trata de una carrera de velocidad, sino tan solo de resistencia! El mundo hoy en día tuvo que ponerse en pausa, para que te dieras cuenta que algunas veces, te lleva a una velocidad que simplemente no te da ni espacios para respirar y mucho menos para sanar heridas.
Tómate un pequeño tiempo, en medio de tu vida tan ocupada y dedícate a limpiar heridas, a reposar tu alma y a dejar que tu espíritu te muestre todo aquello que, por las prisas, has dejado de ver.
ALGUNAS VECES, LOS DETALLES MÁS HERMOSOS, ¡SOLO SE LOGRAN APRECIAR SI TE TOMAS EL TIEMPO DE ANALIZAR SU BELLEZA! Ya que un atardecer no dura para siempre, pero si decides apreciarlo y disfrutarlo, su recuerdo puede durar vivo en tu corazón por muchísimo tiempo. ¡RECUERDA, HAY TIEMPO PARA TODO!
A veces solo debes caminar en vez de correr.
Todo Tiene Su Tiempo:
"3 Todo tiene su tiempo, y todo lo que se quiere debajo del cielo tiene su hora.
2 Tiempo de nacer, y tiempo de morir; tiempo de plantar, y tiempo de arrancar lo plantado;
3 tiempo de matar, y tiempo de curar; tiempo de destruir, y tiempo de edificar;
4 tiempo de llorar, y tiempo de reír; tiempo de endechar, y tiempo de bailar;
5 tiempo de esparcir piedras, y tiempo de juntar piedras; tiempo de abrazar, y tiempo de abstenerse de abrazar;
6 tiempo de buscar, y tiempo de perder; tiempo de guardar, y tiempo de desechar;
7 tiempo de romper, y tiempo de coser; tiempo de callar, y tiempo de hablar;
8 tiempo de amar, y tiempo de aborrecer; tiempo de guerra, y tiempo de paz."
Eclesiastés 3:1-8
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Autor: Mario Rosales
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